En la primera semana
de abril de este año, participe en el III Congreso Latinoamericano de Riesgos
realizado por Risk Intelligent en San José, Costa Rica; durante la realización del evento tuve la
oportunidad de interactuar con o mejor dicho, de aprender de profesionales de área
de gestión de riesgos, que si dieron cita en esta actividad. Durante uno de los
recesos, una persona se me acerco y me pregunto lo siguiente:
¿Por qué en muchas ocasiones los procesos de gestión de
riesgos fracasan, a pesar de la organización contar con un sistema sofisticado
de información, tecnología de punta para capturar los eventos de riesgo y
personal capacitado?
Mi repuesta
fue la presentación de un pasaje llamado “El Pensamiento Grupal: Puntos Ciegos
Compartidos”, del libro “Focus” escrito por el afamado pensador Daniel Goleman,
el cual presente dos casos de errores de grupo:
Caso No. 1:
“En los
inicios de la crisis económica de los productos de inversión basados en las
llamadas hipotecas basura, se entrevistó a un financiero cuyo trabajo había
consistido, precisamente, en la creación de esos mismos productos. En esa
entrevista, explicó que su trabajo rutinario había sido tomar grandes
cantidades de tales hipotecas y dividirlas en tres grandes grupos: las menos
malas, las no tan buenas y las francamente pésimas. Luego debía repetir la
misma operación y acabar creando, con cada uno de los grupos así organizados,
productos de inversión derivados de ellos.
Y su
respuesta a la pregunta de quién querría comprar ese tipo de productos fue: “¡Idiotas,
claro está!”.
Pero lo
cierto es que hubo gente aparentemente muy inteligente que, ignorando las
señales de que esos productos derivados no merecían la pena y subrayando lo que
pudiera apoyar tal decisión, invirtieron dinero en ellos. Cuando, quien ignora
las evidencias que apuntan en sentido contrario no es un individuo, sino un
grupo, se habla de “pensamiento grupal”. La necesidad implícita de sustentar
una determinada opinión (descuidando aspectos esenciales que apuntan en sentido
contrario) genera puntos ciegos que desembocan en decisiones equivocadas”.
Caso No. 2:
“El círculo
interno del presidente George W. Bush, y su decisión de invadir Iraq basándose
en su supuesta posesión de “armas de destrucción masiva”, nos proporcionan un
ejemplo clásico en este sentido, y lo mismo sucede también con los círculos de
jugadores en Bolsa que alentaron el colapso de los productos de inversión
derivados de las hipotecas. Ambos ejemplos de catástrofes provocadas por el
pensamiento grupal se refieren a grupos aislados de personas responsables de decisiones
que no se formularon las preguntas adecuadas o que, entrando en una espiral de
autoafirmación, ignoraron los datos que apuntaban en otra dirección.”
Finalice mi análisis con una frase de JP Morgan quien dijo:
“Ninguna técnica analítica por más sofisticada que sea, podrá reemplazar
a la experiencia y el buen juicio profesional en el manejo de los riegos”.
Moraleja: Tenga siempre presente que la gente hace sus
elecciones en base a sus emociones (y luego usa los datos para justificar las mismas).
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Buen dia a tod@s, en México esta sonando mucho un caso de una empresa llamada Oceanografia la cual fue inhabilitada por la PGR. por fraude y posible lavado de dinero, ante todo este escándalo, como me gustaría poder ver los informes de la actividad de auditoria interna, que supongo deberían de tener, ¿que dicen en cuanto a los riesgos evidenciados en la compañía?, ¿que dicen los dictamentes de los auditores externos? ¿que acciones se tomaron al respecto?, supongo que ninguna. En mi corta experiencia laboral me ha tocado tratar con personal de la operación donde minimiza tus hallazgos de auditoria y minimiza los riesgos que le estas mostrando sin embargo aqui es donde nace la habilidad del auditor interno para mostrar y saber vender correctamente el riesgo al comité a pesar de que el responsable de la unidad de negocio este en contra, me pregunto no habrá pasado esto en el caso Oceanografia, donde la actividad de auditoria interna levanto la mano y dijo "heyy cuidado aquí hay un riesgo" y la operación ignoro sus comentarios. buen día y saludos.
ResponderEliminarMuy acertado tu comentario, José Luis.
EliminarSolo puedo agregar que: Si en algo los Directores de Auditoría Interna estamos de acuerdo, es en la necesidad de mostrar valor en circunstancias difíciles. Aunque se enfrente con presiones tremendas y con obstáculos desalentadores, el director de auditoría interna deberá mantenerse firmemente en el camino correcto y comunicar de forma clara cuando los riesgos no son manejados adecuadamente. Tenemos la responsabilidad de ser quien esté dispuesto a dar un paso adelante, cuando las cosas no están yendo bien, y a comunicar el mensaje de forma oportuna y drecta.
Saludos y muchas gracias por tu reflexión sobre el tema.